Los gestos comunes realzan la reverencia, la unidad

North Texas Catholic
(Apr 21, 2023) Entendiendo-El-Misterio

Para quien mire desde fuera —y a veces para los católicos mismos— los gestos de la Misa pueden resultar un tanto confusos. Ponerse de pie. Sentarse. Ponerse de rodillas. Hacer una genuflexión. Hacer una reverencia.

En esta entrega de “Entendiendo el Misterio”, el Padre Thu Nguyen explica el significado existente detrás de los gestos, el momento en el que se realizan y por qué son importantes para la celebración que los fieles hacen de la Misa.

 

¿Cuál es el significado detrás de los gestos principales de la liturgia (ponerse de pie, arrodillarse y sentarse)?

Padre Nguyen: Dirijamos nuestra atención a estos tres gestos principales. Se describen en el Misal Romano, párrafo 42: “Los gestos y posturas corporales, tanto del sacerdote, del diácono y de los ministros, como del pueblo, deben tender a que toda la celebración resplandezca por el noble decoro y por la sencillez, a que se comprenda el significado verdadero y pleno de cada una de sus diversas partes y a que se favorezca la participación de todos”.

Esa es la razón por la que tú y yo adoptamos las mismas posturas. Me puedes decir: “Verás, yo soy muy piadoso, por eso me pondré de rodillas en este momento” mientras que el resto de la asamblea está de pie. Sin embargo, a su vez estar de pie también significa algo.

Volvamos al documento del papa Francisco Desiderio Desideravi, párrafo 53. Ahí escribe: “Cada gesto y cada palabra contienen una acción precisa que es siempre nueva, porque encuentra un momento siempre nuevo en nuestra vida. Permitidme explicarlo con un sencillo ejemplo. Nos arrodillamos para pedir perdón; para doblegar nuestro orgullo; para entregar nuestras lágrimas a Dios; para suplicar su intervención; para agradecerle un don recibido: es siempre el mismo gesto, que expresa esencialmente nuestra pequeñez ante Dios”.

Es por eso que, en la Plegaria Eucarística, cada uno de nosotros se arrodilla. El sacerdote celebrante, hace una genuflexión. Hace una reverencia tras la Consagración porque no solo reconoce la presencia de Dios que se transforma de pan en Cuerpo y de vino en Sangre, sino que también reconoce la Resurrección de Jesucristo. La tercera genuflexión, cuando fragmenta el Cuerpo y lo deposita en el cáliz de la preciosa Sangre, simboliza la unión del Cuerpo y de la Sangre, la Resurrección del Señor.

Él hace una genuflexión, significa que está adorando. Por lo mismo, el gesto de arrodillarse es importante.

 

¿Por qué y cuándo hay que estar de pie durante la Misa?

Padre Nguyen: Estar de pie es signo de respeto y de honra para con Dios, para con el celebrante y para con los sagrados elementos de la liturgia. Desde los inicios de la Iglesia, esta postura se ha entendido como la disposición de quienes han resucitado con Cristo y buscan las cosas de arriba.

Estar de pie demuestra nuestra plena reverencia en oración ante Dios, no por orgullo, sino en humilde gratitud, reconociendo los hechos salvíficos que Dios ha realizado al crear y redimir a cada uno de nosotros. Estar de pie demuestra que se reconoce el maravilloso don que llega por el Bautismo, gracias al cual participamos en la vida de Dios. Estar de pie es apropiado también para oír y prestar atención a las palabras y hechos del Señor durante la proclamación del Evangelio.

La USCCB ha elegido el estar de pie como la postura adecuada para recibir la Comunión.

 

¿En qué momento nos sentamos y por qué?

Padre Nguyen: Por otro lado, los fieles se deben sentar durante las lecturas que preceden al Evangelio, durante el Salmo responsorial, la homilía y durante la preparación de las ofrendas a la hora del Ofertorio; y, pueden sentarse o arrodillarse, según resulte apropiado, durante el periodo del silencio sagrado que sigue a la Comunión.

Tomar asiento es la postura de la escucha y la meditación durante la celebración de la Liturgia de la Palabra. Mientras se encuentran sentados, los fieles deben esforzarse por asumir dicha postura como de estar a la espera y atentos, más que simplemente como una postura de descanso (como lo son, por ejemplo, el encorvarse o echarse hacia atrás).

Por el bien de la uniformidad, la reverencia y la unidad comunitaria en los gestos y posturas durante la misma celebración, el fiel debe seguir las enseñanzas e instrucciones de cada conferencia y obispo que le corresponde y, de manera especial, con lo que se establece en el Misal Romano.

Padre Thu,, trending-english