Escuelas más seguras
Las escuelas de la Diócesis de Fort Worth aumentaron en gran medida la seguridad de sus planteles al agregar en el otoño oficiales de la policía que trabajan fuera de sus horas laborables regulares.
“Después de la tragedia de Uvalde todas las escuelas comenzaron a reevaluar su enfoque y a buscar qué medidas se podían tomar para proteger mejor a nuestros niños”, dijo Mike Short, el Director de Seguridad de la Diócesis.
En la Escuela Primaria Robb 19 niños y dos maestros perdieron la vida el 24 de mayo de 2022, luego de que un hombre de 18 años armado ingresara a la escuela y se atrincherara en un salón de clases de cuarto grado.
Cuando Short, el Superintendente Brinton Smith y otros administradores diocesanos analizaron qué acciones se podían tomar para mejorar la seguridad en las escuelas, la respuesta fue clara.
Smith dijo: “La mejor forma de seguridad es que los estudiantes tengan un oficial de la policía en el campus en caso de que suceda algo. Por mucho que apreciemos la seguridad técnica, como las cámaras y los controles de acceso de las puertas, no hay nada mejor que tener un oficial de la policía en el plantel”.
Los nuevos Oficiales de Recursos Escolares (SRO, por sus siglas en inglés) están contratados por First Responder Protective Services y provienen de los departamentos de la policía cercanos a cada escuela, dijo Short. Se asignan oficiales específicos a cada escuela para que los estudiantes, las familias y el personal se familiaricen con ellos y para que los oficiales conozcan la comunidad del campus al que están asignados.
“El programa de los Oficiales de Recursos Escolares está diseñado para fomentar la confianza en los oficiales de la policía, para que ellos actúen como elemento disuasorio y brinden una respuesta rápida en caso de que algo suceda. Están en la escuela para garantizar la seguridad de los estudiantes y del personal”, explicó Short.
Los oficiales de seguridad comenzaron a aparecer en los planteles escolares diocesanos a fines de agosto del año pasado. Las familias y los miembros del personal han brindado un gran apoyo a la nueva iniciativa, según Short.
Joe Trausch, gerente sénior de desarrollo comercial de First Responder Protective Services, dijo que los oficiales de la policía están contentos de brindar seguridad a las escuelas “porque creen que es muy importante”.
Los comentarios que se han recibido tanto de los funcionarios escolares como de los oficiales han sido abrumadoramente positivos, comentó Trausch.
“Nuestros oficiales disfrutan su trabajo porque las escuelas los aprecian y los apoyan”, apuntó Trausch. “Se necesita mucha gente para poner en marcha un proyecto como éste y estamos muy complacidos y emocionados de ayudar a la Diócesis de Fort Worth a implementarlo”.
Short dijo que estos oficiales de la policía están ayudando también a educar a los miembros de la comunidad escolar sobre los problemas de salud mental y sobre lo que deben observar en las redes sociales para proteger mejor las escuelas.
Además, los oficiales capacitan al personal docente de la escuela sobre los protocolos de respuesta estándar. Su enfoque comprende cinco respuestas diferentes: el bloqueo, lo que significa que hay un intruso o un peligro inmediato que requiere cerrar con llave las puertas del salón de clases; asegurar el edificio de un peligro exterior; la evacuación en caso de un incendio; buscar refugio ante la posibilidad de un tornado; y permanecer en las aulas cuando exista un problema menos grave, como un derrame de líquido en el pasillo que requiera limpieza.
Financiado por los fieles
Si bien los oficiales de recursos escolares han sido un elemento fijo en las escuelas secundarias públicas por muchos años y actualmente se ven a menudo en los planteles escolares de la primaria e intermedia, y se financian con los impuestos pagados por los contribuyentes. Sin embargo, las escuelas privadas deben aportar sus propios fondos.
Los administradores escolares y de seguridad diocesanos estiman que el nuevo programa de oficiales de recursos escolares, junto con la mejora de la seguridad de los edificios en varias escuelas más viejas, costará este año unos $2 millones.
La Fundación de Avance, una organización sin fines de lucro independiente de la Diócesis, puede recaudar fondos para necesidades específicas dentro de la Diócesis de Fort Worth.
Renée Underwood, la Directora de Desarrollo de la Fundación de Avance, dijo que todos los fondos recaudados se utilizan para el propósito que solicita el donante.
“Cuando nos contactaron por primera vez sobre la seguridad de las escuelas, supimos que necesitarían alrededor de $2 millones para el primer año”, dijo Underwood. “Ésa es una subvención importante que se necesita. Todo lo que podemos hacer es a través de la corresponsabilidad y generosidad de católicos buenos y fieles”.
Los funcionarios escolares enviaron correos electrónicos y cartas a las familias y feligreses y publicaron en las redes sociales diocesanas sobre las mejoras de seguridad. La Fundación de Avance recibe donaciones para la seguridad escolar casi a diario, dijo Underwood.
Los donantes pueden contribuir a través de la página de Seguridad de las Escuelas Católicas en AdvancementFoundation.org o enviar una donación por correo. Todos las donaciones son deducibles de impuestos.
Medidas de protección adicionales
Además de los oficiales de recursos escolares, Smith dijo que el personal escolar y de seguridad diocesano está trabajando en varias modificaciones de los edificios para hacer que las escuelas sean más seguras. Por ejemplo, añadir vestíbulos seguros donde un visitante sea identificado por cámara y audio antes de que se abra una puerta y los visitantes sean admitidos al área de la oficina.
Se quiere también que las escuelas tengan una cantidad adecuada de cámaras y controles de acceso.
Short señaló que los planteles escolares diocesanos más viejos necesitarán varias modificaciones para mejorar la seguridad.
“Estamos trabajando con la Fundación de Avance para crear un fondo especial de seguridad, que incluya no sólo los fondos para el programa de Oficiales de Recursos Escolares”.
Short dijo que la Diócesis está trabajando también para expandir el programa Guardian Ministry, que proporciona voluntarios seleccionados y capacitados para la seguridad de las parroquias, de manera que se incluyan además los eventos escolares, especialmente los juegos en Nolan Catholic High School.
“Esperamos poder expandir este programa a otras escuelas”, añadió. “Así serían más ojos y oídos, y ayuda adicional para los oficiales de seguridad”.