Un amor natural

Después de tener su primer bebé, Brenda Reyes de Lara, que es feligrés de la Parroquia de St. Matthew, se sentía rara; como que su cuerpo no se sentía completamente normal. “No tenía idea de lo que estaba pasando y mis hormonas estaban trastornadas”, comentó.

Como parte del proceso de obtener la validación de su matrimonio en la Iglesia, ella y su esposo tomaron una clase sobre el Método de la Ovulación Billings, un método de Planificación Familiar Natural (PFN) que utiliza el moco cervical para predecir el momento de la ovulación y, por lo tanto, indica el período más fértil del ciclo mensual de una mujer. Los patrones hormonales que ellos observaron en las gráficas presentadas le ayudaron a comprender los cambios postparto que estaban ocurriendo en su cuerpo. “Sentí que conocer este método de planificación familiar natural fue verdaderamente la respuesta de Dios a mis constantes oraciones”, añadió Brenda. 

Reyes de Lara y su esposo llevan cinco años enseñando el Método de la Ovulación Billings. Reyes de Lara es la coordinadora de Planificación Familiar Natural de la Diócesis de Fort Worth. Ella alienta a todos a aprender la Planificación Familiar Natural: las parejas comprometidas y las casadas, mujeres solteras e incluso las chicas adolescentes. “Muchas parejas piensan que la Planificación Natural es sólo para las parejas casadas o cuando quieran tener hijos”, dijo. “Sin embargo, este método va más allá… se trata de aprender más sobre tu salud y conocer mejor tu cuerpo”.

“Yo diría que es muy útil, incluso en nuestro mundo secular. He notado que las personas se alejan del control de la natalidad no necesariamente por razones religiosas, sino también por razones de salud”, agregó Chris Vaughan, Director diocesano de la oficina de Matrimonio y Vida Familiar. “Nosotros lo hacemos por Jesucristo. En la cruz, Él nos muestra lo que es el verdadero amor”.

Los instructores y expertos de la Planificación Familiar Natural se basan en investigaciones científicas y se inspiran en el amor audaz y desinteresado de Cristo al afirmar que los métodos de planificación natural empoderan a las mujeres (y a los hombres) para cuidar sus cuerpos “en la salud y la enfermedad”, y para mostrar su amor desinteresado como Cristo lo hizo en la cruz.

Punto de vista científico  

La Planificación Familiar Natural o PFN, como se le conoce en los círculos seculares y los métodos basados en los estudios de la fertilidad, interpreta los signos y síntomas de los cambios hormonales en el cuerpo de una mujer para determinar los períodos fértiles e infértiles de su ciclo menstrual. Los métodos de planificación natural ayudan a la pareja a determinar en qué momento del mes ellos tienen la mejor posibilidad de que la concepción ocurra. Si se desea evitar el embarazo, una pareja puede abstenerse de la actividad sexual durante los días fértiles de la mujer.

La Diócesis de Fort Worth ofrece instrucción acerca de cuatro métodos de Planificación Familiar Natural y todos se basan en investigaciones científicas serias.

Vaughan explicó las razones por las que la Iglesia enseña a las mujeres a trabajar con la fertilidad de sus cuerpos, en lugar de tratar de eliminarla mediante anticonceptivos químicos o cirugía. “Mutilar el cuerpo humano, y generalmente el cuerpo femenino, es perjudicial a la salud”, afirmó. 

“Tener la regla no es una enfermedad”, escribieron Clara Moskowitz y Jen Schwartz en un importante artículo sobre la salud reproductiva de las mujeres publicado por Scientific American Journal en mayo de 2019. En la misma edición, Maya Dusenbery escribió: “Una pareja sólo puede fertilizar un óvulo hasta unos cinco días antes de la ovulación y dos días después debido a la viabilidad combinada del esperma y el óvulo en el cuerpo femenino. Por eso, el objetivo de los métodos basados en el estudio de la fertilidad, conocidos también en inglés como FABM, es predecir, y luego confirmar, cuándo ocurre la ovulación”. 

De acuerdo con una revisión de los estudios científicos realizada en el 2013 por Michael Manhart, PhD, y varios colegas, “las tasas de los embarazos no deseados de las usuarias de métodos bien investigados de conocimiento de la fertilidad son comparables a las de muchos otros métodos” de planificación familiar. Dusenbery escribió: “Cuando se siguen correctamente, algunos métodos basados en el conocimiento de la fertilidad tienen una efectividad de 95 al 99 por ciento”.

Además de actuar en contra de la doctrina de la Iglesia, usar métodos de barrera es arriesgado, advirtió Nicole Havrilla, que es feligrés de la Catedral de St. Patrick. Usarlos durante el período fértil puede resultar en un embarazo no deseado, ya que en ese momento la pareja confía en la eficacia del método de barrera en lugar de la eficacia de la planificación natural. “Te falló el condón; la Planificación Familiar Natural no te falló”, aseveró. Si se quiere lograr una precisión óptima, los usuarios de la Planificación Familiar Natural deben abstenerse de tener relaciones sexuales durante los días fértiles de la mujer.

“Dios nos dio señales externas de nuestra fertilidad”, agregó Havrilla. Al registrar algunos signos y síntomas cada día, las mujeres pueden conocer sus patrones de fertilidad y ser más proactivas en su atención médica y sus hábitos reproductivos. Nicole Havrilla es la fundadora y presidenta de la clínica WholeLife Authentic Care de Fort Worth, cuyos médicos y profesionales utilizan el modelo Creighton FertilityCare System para ayudar a las mujeres a dar seguimiento a su ciclo menstrual e identificar la ovulación y su período fertil, ya sea que estén tratando de lograr un embarazo, evitar quedar embarazada o para mejorar su salud. 

Empoderamiento de las mujeres

Las mujeres que practican la Planificación Familiar Natural registran a diario signos relacionados con su salud. Según Stephanie Gavin, una practicante certificada de FertilityCare que asiste a la Parroquia de Holy Family y la Parroquia de St. Andrew, las tablas y gráficas de una mujer “identifican señales de alerta que podrían indicar la necesidad de la atención de un médico”, apuntó. Gavin y sus compañeros practicantes de WholeLife Authentic Care utilizan los datos gráficos de Creighton de sus pacientes para desarrollar planes de tratamiento personalizados.

Debido a la falta de comprensión de la variación normal de los ciclos de una mujer, Weschler señaló que muchas parejas “podrían creer que son infértiles cuando en realidad no lo son”. Muchas mujeres se someten a planes de diagnóstico y tratamiento costosos, invasivos e innecesarios cuando un cuadro de fertilidad les hubiera podido proporcionar suficiente información.

Para las mujeres cuyos datos gráficos indican la necesidad de atención médica, el registro activo puede ayudar a prevenir complicaciones de salud graves, la infertilidad e incluso algunos abortos espontáneos. “Trazar su ciclo mensual puede ayudar a que la mujer se sienta en un mejor estado de ánimo y proporcionar la mejor información posible”, dijo Havrilla. Incluso cuando una mujer no puede lograr sus objetivos de fertilidad, agregó, la elaboración de las tablas y los datos gráficos puede brindarles a las mujeres y a las parejas “una sensación de paz, pues se sienten que hicieron todo lo que pudieron… y que están llamados a algo diferente”. Comentó además que practicar la Planificación Familiar Natural y buscar atención médica personalizada basada en los datos gráficos puede ayudar a una mujer a “mantener una mejor salud”.

Amar como Cristo nos ama

Los sermones del Papa San Juan Pablo II sobre la Teología del Cuerpo advierten a los hombres y las mujeres que no “reduzcan todas las riquezas de su feminidad a un solo valor: el sexo. La lujuria oscurece el significado del cuerpo y el valor de la persona”.

“El Papa San Pablo VI en Humanae Vitae nos dice que el amor es libre, total, fiel y fructífero”, dijo Vaughan. “Es un regalo gratuito, como el amor de Jesús es gratuito”. Según Vaughan, el uso de la Planificación Familiar Natural lleva a aceptar incondicionalmente todos los aspectos del cuerpo de su pareja, incluida la fertilidad. Vaughan hizo referencia a una cita bíblica que describe la noche de bodas de Tobías y Sara en el Libro de Tobías: "Ahora estoy tomando a esta pariente mía, no para satisfacer una pasión desordenada, sino para constituir un verdadero matrimonio”. Ése es el tipo de amor al que aspira la Planificación Familiar Natural.

Abstenerse de tener relaciones íntimas durante el período fértil de la mujer para evitar el embarazo es un acto mutuo que conlleva el autosacrificio de la pareja. “Ciertamente es bueno… pero hay veces que no te gusta”, dijo Vaughan.

El período fértil de la mujer en algunas parejas es breve. Para otras, los tiempos de abstinencia pueden ser mucho más largos. “Esta práctica ayuda a las parejas cuando deben pasar por períodos más prolongados de abstinencia debido a problemas de salud crónicos o si en algún momento experimentan una forma de ciclo irregular, disfunción o dolor”, señaló Amy Rustand, feligrés de la Parroquia de St. Elizabeth Ann Seton. Rustand y su esposo han estado enseñando la Planificación Familiar Natural durante quince años. “El método de Planificación Familiar Natural normaliza la abstinencia, elimina el estigma de la idea y ayuda a las parejas a reconocer las gracias que pueden recibir al renunciar juntos a un bien como la intimidad sexual y la reproducción”.

“Cuando pronuncias tus votos, los estás aceptando en la salud y en la enfermedad”, dijo Reyes de Lara. “A veces puede resultar difícil, pero se convierte en ofrenda al unirlo al sufrimiento de Cristo en la cruz”.

“El matrimonio no debe reducirse solamente al acto sexual conyugal”, dijo Vaughan. “Tenemos que fomentar otras formas de darnos el uno al otro. De eso se trata la Planificación Familiar Natural”. 

Havrilla, quien ha experimentado muchos períodos prolongados de abstinencia por razones de salud, alienta a las parejas a "volver a los días de cortejo y enamoramiento". Cuando una pareja practica la Planificación Familiar Natural, “se adquiere un nivel de empatía mutua muy profundo”, dijo Havrilla.

El aprendizaje de la Planificación Familiar Natural fomenta también el amor a sí misma y la apreciación de la forma que Dios creó a la mujer. La Planificación Familiar Natural le enseñó a Havrilla a “apreciar lo que ocurre en mi cuerpo”.

Después de conocer a fondo la Planificación Familiar Natural, Reyes de Lara comenta que “se sintió hipnotizada por el divino don de ser mujer”.